¿Qué es el consumo consciente? 3 claves para aplicarlo - The Secrecy Magazine
consumo consciente

¿Qué es el consumo consciente? 3 claves para aplicarlo

5 minutos

El consumo consciente es tendencia desde hace ya unos años, pero ¿sabes qué significa y cómo puedes empezar a practicarlo?

Aquí te daremos las 3 claves principales que lo definen y usaremos ejemplos prácticos para que las pongas en marcha la próxima vez que vayas al supermercado o a tu tienda favorita.
Pero antes de zambullirnos en esta guía práctica de consumo consciente, es necesario que sepamos exactamente a qué se refieren estos términos. Consumo consciente significa satisfacer nuestras necesidades habiendo reflexionado sobre el impacto que tendrán nuestros actos de compra a nivel social, económico y medioambiental.

Descubre nuestra nueva colección de joyas

1a Clave: Reducir el consumo

Para practicar un consumo consciente es imprescindible reflexionar sobre nuestras necesidades. ¿Es realmente necesario comprar un par de zapatos más? ¿Necesitas abastecerte de tanta fruta y verdura para la semana? 

Reducir el consumo no solamente pasa por no comprar esto o aquello, sino también por cuidar mejor de nuestros objetos para que no pasen a ser obsoletos antes de la cuenta. Además, podemos reducir el consumo arreglando lo estropeado, evitando así una compra innecesaria más.

Así que ya sabes, incorpora el minimalismo en tu vida y trata de evitar aquellas compras por impulso ¡dale otra oportunidad a aquella camisa a la que le cayó un botón o a aquel par de botas cuyo cuero parece desgastado!

Comenzar por escoger joyas atemporales y de calidad es una manera de reducir tu consumo. En Secrecy apostamos por el diseño de piezas que podrás mantener en tu joyero durante muchos años, ¡descúbrelas aquí!

2a Clave: Consumir sin comprar

No, no es un oxímoron. Se puede consumir sin comprar y aquí te daremos un par de ejemplos para que lo pongas en práctica. 

Una manera de consumir sin comprar es tomar prestado. Puedes pedir algo que necesites a una amiga o bien a tu familia, aunque también puedes hacer uso de bienes que pertenecen al estado, como por ejemplo libros y películas tomados de la biblioteca de tu ciudad.

Otra forma de practicar el consumo consciente, aplicando esta segunda clave de consumir sin comprar, es intercambiando bienes con alguien de tu comunidad. Por ejemplo, intercambiando un objeto por otro o un servicio por un objeto.

3a Clave: Comprar con criterio

Esta última clave del consumo consciente pasa por comprar con criterio y es que debemos hacernos preguntas como ¿de dónde viene?, ¿por qué procesos pasa?, ¿cuál es el impacto medioambiental o social de esto?, ¿es su packaging reciclable?

Es decir, lo ideal sería que compráramos bienes de proximidad, de comercio justo o de empresas que practiquen la reinserción social. También podemos hacer uso de bienes de segunda mano (a lo que hace ya un par de años estamos más acostumbrados) y tener en cuenta si es reciclable o reutilizable.

Elige compañías que prioricen a las personas y a la tierra, compra productos amigables con el planeta, que no utilicen procesos contaminantes o que reduzcan el uso de plásticos.

Como ves, el consumo consciente no es nada complicado de poner en práctica, solamente necesitamos ser un poco más responsables en nuestra decisión de compra e informarnos sobre el origen e impacto de aquello que consumimos.

¿No sería genial que todo el mundo aplicara las 3 claves para un consumo consciente? ¡Ahora es tu tarea informar y concienciar a tu entorno social sobre el consumo consciente! Aquí tienes otro artículo que te puede ser de utilidad.