¿Estás buscando un plan especial para compartir con tus amigos, tu familia o tu pareja? ¿Quizá buscas un regalo diferente para esa persona que se lo merece todo? No hay nada con tanto valor emocional como regalar (o, simplemente, compartir) una experiencia única, que pasará a formar parte de vuestros recuerdos para siempre, y que nunca olvidaréis. Te proponemos 9 experiencias inolvidables, originales y que se salen de los típicos regalos materiales. ¿Con cuál te quedas?
Descubrir un bar escondido
Todo lo que se sale del circuito habitual a la hora de salir por ahí tiene un toque misterioso y atractivo de lo más apetecible. En todas las ciudades hay bares clandestinos y escondidos (al más famoso de París, por ejemplo, se accede por una lavadora, pues está ubicado en lo que parece una lavandería). Entre las muchas opciones que hay en Madrid, nos encanta Calle 365, un restaurante-bar mexicano que está oculto tras una puerta en una botillería clásica.
Dormir en un hotel cápsula
Seguro que has oído hablar de los hoteles cápsula, típicamente japoneses, donde las “habitaciones” son pequeños compartimentos que recuerdan a una nave espacial. Este concepto tan diferente de hostelería ha llegado ya a nuestro país, con propuestas como el hostal Oxygen, en pleno centro de la capital.
Vivir el festival Holi
No existe en el mundo una fiesta más alegre y colorida que el festival Holi, que tiene lugar en la India y Nepal para celebrar la llegada de la primavera. Si puedes viajar a estos lugares, fantástico, pero si no, encontrarás versiones del Holi a lo largo y ancho del mundo (también en España), quizá no tan espectaculares pero sí igual de coloridas.
Contemplar la magia de las auroras boreales
Siéntete como si estuvieras en la película Frozen bajo un cielo lleno de luz y color. Finlandia, Noruega, Islandia, Suecia o también Canadá o Alaska, al otro lado del Atlántico, son solo algunos de los lugares donde podrás observar las auroras boreales, un espectáculo que quedará grabado en tu retina para siempre.
¿Quién dijo miedo a las alturas?
No hay nada para perder el miedo a algo como enfrentarse a ello. Si te gustan los deportes extremos y quieres sentir como si volaras tienes que probar actividades como el sky-diving, el paracaidismo o el puénting. Sentirás la libertad de volar… y no lo olvidarás nunca.
Darte un baño de barro
No solo resulta divertidísimo, sino que, además, es muy beneficioso para la piel (y deja los poros que es un primor). Aunque destinos como el mar Muerto o las termas de Copahue en Argentina tienen la fama, si no quieres ir tan lejos en España encontrarás lugares donde darte un baño de barro natural: en Murcia, Cádiz, Ibiza, Girona, Huelva… ¡tienes que probarlo!
Vivir el Carnaval de Río… o de Venecia
Si hay dos destinos en el mundo donde el carnaval es la fiesta grande, son, sin duda, Río de Janeiro y Venecia. El ritmo frenético de la samba y la batucada en uno, y el misterio de las máscaras en otra lo convertirán en una experiencia inolvidable que querrás repetir.
Explorar un lugar abandonado
Tampoco hace falta irse muy lejos para poder vivir la experiencia de visitar un pueblo abandonado, recorrer sus calles e imaginar qué ocurrió en cada uno de sus rincones. En Granadilla, en la provincia de Cáceres, te sentirás transportado a otra época, y su entorno natural te conquistará.
Nadar con delfines, manatíes, osos marinos o… ¡tiburones!
Estas actividades acuáticas con fauna marina resultan súper atractivas, y las puedes realizar tanto en los destinos más exóticos (desde el Caribe a la Polinesia), como en los más cercanos. En lugares como el Aquarium de Barcelona o Faunia, en Madrid, podrás vivir esta experiencia única.
Así que ya sabes: prepara una experiencia inolvidable, sola o en compañía de quien más te apetezca, y vivirás emociones que no podrás describir con palabras y que quedarán grabadas para siempre en tu memoria. Y si buscas más planes para disfrutar con amigas, no te pierdas nuestras recomendaciones.
Otro tipo de regalo lleno de emoción son las joyas. Te invitamos a descubrir nuestras joyas, otra forma de regalar momentos y emociones.
