La falda es una prenda básica del fondo de armario femenino que siempre es tendencia y nunca pasa de moda. ¿Sabes qué tipo de faldas hay, y cuál es la que más te favorece? Te ayudamos a descubrirlo y a sacarle el máximo partido a tus looks con faldas.
Falda trapecio o en A
Como su nombre indica, tiene forma de A o de trapecio, acampanada, ceñida en la parte de la cintura y se va ensanchando a medida que aumenta el largo. La encontrarás en todos los largos, desde minifaldas a faldas XXL. Muy característica del look lady, femenino y con un toque elegante, dependiendo del tejido y del largo también puede aportar un carácter juvenil y deportivo (pues recuerda al look de las animadoras). También se conoce como A-Line. Es ideal para resaltar las piernas y que parezcan más largas, así como para estilizar la silueta. Es, también, muy buena opción para mujeres de baja estatura.
Falda lápiz o tubo
La hechura de esta falda va ceñida a toda la silueta, cintura, caderas y muslos (e, incluso, pantorrillas en el caso de las faldas largas), pues se va estrechando y ajustando al cuerpo a partir de las caderas. Por lo general, para facilitar el movimiento, suele contar con una abertura en la parte trasera o en el lateral. Es un diseño muy clásico, perfecto para looks de working girl, y que combina de maravilla con una americana o un blazer en sus versiones más formales. Resulta acertada para realzar tanto la cintura como las caderas y los glúteos. Por lo general el largo está justo por encima o justo por debajo de las rodillas, aunque la encontrarás en todos los largos, desde la minifalda a la falda larga.
Falda mini o minifalda
Todo un icono transgresor que nació en los años 60, siempre corta, y que resulta fantástica para presumir de piernas. Se puede combinar tanto con tacón como con calzado casual (lucirla con zapatillas deportivas es tendencia). En su versión con estampado de tartán y tablas, muy al estilo british y con estilo colegiala, es tendencia absoluta desde los años 90, cuando Dolce & Gabbana presentó su icónica propuesta en amarillo en la película Clueless (fuera de onda).
Falda maxi, larga o XXL
Todo lo contrario que las anteriores, las maxifaldas o faldas largas llegan (o, incluso, superan) la altura de los tobillos, y son ideales para quienes buscan un aspecto bohemio y chic al mismo tiempo. Estupendas para estilizar la silueta, dependiendo del estilo y el tejido combinan con todo tipo de calzado, ya sea plano o con tacón.
Falda tulipán
Es un clásico del guardarropa femenino, que encontró su máxima expresión en los años 80, ceñida a la altura del abdomen y amplia en las caderas (de ahí su nombre, pues su forma recuerda a los tulipanes). Este corte es perfecto para resaltar las curvas de cualquier tipo de mujer.
Falda plisada
Dentro de esta categoría tenemos desde las faldas más sencillas con tablas mini hasta las más espectaculares, inspiradas en el ballet y con capas y capas de tul, al más puro estilo Carrie Bradshaw. Además de ser muy cómodas y femeninas favorecen, especialmente en los largos midi y maxi, a todo tipo de cuerpos. También se conocen como faldas acordeón.
Falda wrap o pareo
Esta falda es una pieza abierta que, como un pareo, se cruza y se anuda (o abrocha), ya sea por delante, por detrás, o, generalmente, a un lado. Se inspira en el wrap dress, popularizado por la diseñadora Diane von Furstenberg. Aportan volumen, por lo que son una opción muy acertada para mujeres muy delgadas o con pocas curvas. Si lo que buscas es estilizar, mejor opta por otro tipo de faldas.
Y recuerda, dale el toque final a tu look con complementos. No olvides que una joya puede resaltar tu belleza natural, resaltar tus atributos y hacerte sentir más segura. Te invitamos a descubrir nuestra colección de essentials aquí.
