Desde tiempos inmemoriales, determinados iconos y objetos se han relacionado con la buena suerte (y, también, con la protección frente a la mala suerte), y se han considerado como amuletos y símbolos de suerte. Podemos encontrar desde elementos de la naturaleza, como pueden ser el clásico trébol de cuatro hojas o el arcoíris, a diferentes animales e insectos (escarabajos, elefantes, búhos, mariquitas…), pasando por las estrellas, el sol o la luna. También hay determinados símbolos culturales o religiosos (como pueden ser la cruz, el árbol de la vida, la mano de Fátima o el nazar, también llamado ojo turco), e incluso objetos cotidianos (como, por ejemplo las llaves, los candados, las monedas, las herraduras o los atrapasueños, muy típicos de la cultura de los nativos americanos) que tradicionalmente se asocian con la buena suerte.
El símbolo de suerte en la joyería
Y si alguien cree en la suerte, ¿qué mejor manera de llevarla siempre consigo que en una joya? Los símbolos de suerte son un motivo muy habitual en joyería, pues muchas personas se sienten más seguras o protegidas cuando llevan su amuleto cerca de sí. Pero tampoco hace falta utilizar un símbolo de suerte predeterminado como tal: cada persona le da un significado a las cosas, y, en el caso de las joyas, cualquier pieza que tiene una historia especial, que se compró en un momento determinado o fue un regalo de alguien querido, puede convertirse en nuestro amuleto de la suerte particular. Vamos a ver el por qué de cuatro de los más extendidos.
El trébol de cuatro hojas
En la antigua Irlanda poblada por los celtas se creía que los tréboles de cuatro hojas, símbolos de suerte por excelencia, tenían poderes místicos relacionados con cada una de sus hojas, que, según las fuentes, simbolizaban o bien amor, suerte, esperanza y fe, o bien amor, salud, riqueza y fama. Hoy en día encontrar un trébol de cuatro hojas se sigue considerando un buen augurio, al igual que cultivarlos en casa, y el trébol sigue siendo uno de los símbolos de suerte más populares. ¿Te gustaría tener una joya personalizada con este bonito icono?.
La herradura
Es uno de los iconos relacionados con la suerte más antiguos, y se cree que se le atribuían propiedades protectoras porque protegían las patas de los caballos y evitaban que se lesionaran. Sea como sea, se siguen relacionando con la buena suerte, y hay quien piensa que hay que colgarlas en la puerta de la casa con los extremos hacia arriba, para que la vivienda se llene de buena suerte.
El nazar u ojo turco
Tremendamente popular, este símbolo que parece un ojo azul rodeado de un círculo en un tono azul más intenso tiene, según la tradición turca, el poder de espantar las malas energías, la mala suerte y el mal de ojo. Es muy común en bisutería, y también se coloca a la entrada de las casas, pues se supone que donde haya un nazar, el mal no puede entrar.
El árbol de la vida
Muy característico de la tradición budista, así como de otras culturas orientales, tiene muchas simbologías. Por una parte, se considera que es fuente de conocimiento (ya que bajo él Buda alcanzó la iluminación). Por otra, se piensa que da fuerza para conseguir el éxito en la vida, tanto personal como profesional. Si el árbol de la vida es tu símbolo de suerte preferido, ¿por qué no llevarlo siempre contigo?
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