La keratina es una proteína que constituye cerca del 80% de la fibra capilar (aunque también forma parte de las uñas y de la piel, a las que otorga fuerza y resistencia), y que protege el interior de esta, además de tener mucho que ver con el aspecto del cabello a nivel de brillo, elasticidad y fuerza. Con el paso del tiempo, así como con las agresiones diarias a las que se ve sometido el cabello (como por ejemplo el uso de tintes y decoloraciones, o la exposición frecuente a herramientas de calor como la plancha o la tenacilla), el pelo se deshidrata y la cutícula capilar deja de estar bien sellada, lo que favorece la pérdida de la keratina natural.
Desde Secrecy te animamos a buscar un look que te haga sentir segura de ti misma. Combina un cabello sano con una de nuestras joyas para darle el toque final. ¡Descúbrelas aquí!
Para qué sirve la keratina
Por tanto, como decíamos, la keratina es fundamental para un cabello sano, brillante y fuerte. El principal problema de un cabello sin keratina es que está desprotegido y no puede absorber ni retener los nutrientes, lo que se traduce en un cabello poroso, áspero, mate y en el que el encrespado suele ser la principal característica. Por este motivo, desde hace varios años, los cosméticos (champús, acondicionadores, mascarillas, sprays sin aclarado) y tratamientos capilares con keratina en el salón de peluquería han supuesto todo un boom.
El lado oscuro de la keratina
Durante la década de los 2000 se popularizó un tipo de alisado, el alisado brasileño, que prometía eliminar los rizos y el encrespamiento además de hidratar y reestructurar el cabello. Sin embargo, este tipo de alisado en salón, a base de keratina, llevaba también formaldehídos, unas sustancias químicas derivadas del formol que son muy tóxicas. La FDA norteamericana lo prohibió, y en Europa su uso se permitió solo a concentraciones muy bajas, que, según las autoridades, son inocuas para el organismo. Desde aquel momento fue posible conseguir un liso tabla (también llamado liso asiático) de una forma mucho más segura y saludable.
Tratamientos con keratina natural
A día de hoy los tratamientos de keratina (a menudo denominados keratina vegetal o keratina natural) están libres de formol y sus derivados, y no dañan ni el cuero cabelludo ni la fibra natural. Lo que sí es importante saber antes de someterse a un tratamiento de este tipo es que con él sí conseguiremos controlar los rizos indeseados y el encrespamiento, pero en el caso de los cabellos finos y sin volumen no es la opción más adecuada, pues aunque alisa y controla el frizz, elimina todo el volumen y deja un efecto lamido, extremadamente lacio y nada favorecedor. Por otra parte, los cosméticos que incorporan keratina en su formulación son totalmente seguros y muy recomendables para cabellos ásperos, encrespados y/o rebeldes.
Alternativas a la keratina
Además de los tratamientos a base de keratina, hoy en día podemos encontrar muchas otras opciones para conseguir un cabello sin encrespamiento, liso y manejable. Entre ellas podemos hablar por ejemplo del ácido hialurónico, de la taninoplastia (a base de taninos, sustancias antioxidantes), o de los tratamientos conocidos como “bótox capilar”, que alisan y rejuvenecen el cabello. Al igual que la keratina, en estos tratamientos la duración de los resultados ronda los cuatro meses, y los precios oscilan entre 100 y 400 euros.
Aina Oranich
¡Hola soy Aina Oranich, la persona detrás de la Beautyteca! Es un espacio de reseñas y opiniones de productos de maquillaje, cosmética facial, corporal y capilar dónde comparto mi afición por la belleza. Además, me apasiona el mundo digital así que siempre he enfocado mi carrera profesional al diseño y gestión de proyectos digitales. He trabajado en varias tiendas de belleza y ya en la universidad, tuve la oportunidad de hacer prácticas en una revista de belleza, estética y uñas.
