¿Sabías que el mercado de segunda mano crece por encima del mercado de ropa al por menor de primer uso? Pues sí, lo que antes se consideraba “ropa para pobres” ahora es un negocio más que lucrativo que doblará su volumen en cuatro años (hasta alcanzar los 53.000 millones de euros en 2026).
Aunque estas cifras nos queden muy lejos, somos nosotras, las Millennials y la Generación Z, las responsables de tal crecimiento, que viene de la mano de entender que la ropa no es de usar y tirar, sino que tiene una vida útil que depende de nosotras.
Dentro de este mundo y siguiendo la filosofía del consumo consciente y de la economía circular, Vinted sigue siendo la elegida para vender aquellas prendas que tenemos olvidadas en el armario. Para que todo vaya sobre ruedas y maximices tus ganancias. A continuación te compartimos una lista sobre lo que debes (DO’s) y lo que no debes hacer (DON’Ts).
DO’s
1. Pruébate la ropa
Para que la compradora tenga una idea más real y acertada de cómo es y cómo queda la prenda, pruébatela para hacer fotos. De esta manera, se podrá hacer una imagen mental de cómo le quedaría a ella. Y ya si te sientes inspirada, combina la prenda de la manera más chic posible, así, ¡seguro que la vendes!
2. Descripción gráfica y verbal on point
Otra cosa a tener en cuenta es que tanto la descripción gráfica, es decir, las fotos, y la descripción verbal deben ser lo más claras posibles, para que la compradora no se lleve sorpresas al recibir la prenda.
Además, cuanto mejor descrita esté la prenda, menos preguntas te tendrá que hacer tu posible clienta. Esto no solamente te va a beneficiar a nivel de ahorro de tiempo sino que aumentarán tus probabilidades de vender la prenda. Es decir, cuantas más preguntas te haga la compradora, menos dudas y menos tiempo para replantearse la compra.
Nos interesa que la fotografía venda la prenda de forma impulsiva, así que dedícale tiempo a las fotos, para que sean de buena calidad y se aprecien todos los detalles que hacen especial a tu ropa.
3. Súbelas todas de una vez
Nos hemos fijado que aumenta el número de visitas cuantas más prendas subas de una vez, generando más tráfico a tu armario. Si tienes más de una pieza de ropa o accesorios, agrúpalas y cuando te sientas inspirada, cuélgalas en ráfaga.
4. Ten un detalle
¿Quién no ha recibido un paquete con un detalle sorpresa y ha sentido simpatía absoluta por la persona que envía dicho paquete? Puede que pienses que es una tontería y que una vez acordada la venta, ya está todo hecho. ¡ERROR!
La postventa es tan importante como los momentos previos a ella. No te preocupes, no debes comprar 100 bombones de chocolate para incluirlos en cada paquete. Con un pequeño detalle diferencial, como una tarjetita con tu puño y letra diciendo gracias y que lo disfrute, hará que esa persona se enamore de ti.
Y si ya quieres ponerte profesional, puedes incluir una visit card con tu perfil de Vinted e incluso Instagram para que te siga y esté actualizada en aquellas prendas que vayas subiendo nuevamente.
5. Hashtags, Hashtags, Hashtags!
Vinted también es una red social, así que, cómo no, el uso de hashtags es importante. Como habrás hecho tú en alguna ocasión, las compradoras teclean las palabras clave de lo que persiguen en el buscador de la aplicación.
DON’Ts
1. Ni arrugas, ni pereza
Como te avanzábamos anteriormente, la presentación de la prenda es lo más importante, ya que es la única manera que tiene la compradora de decidir si se lleva esa pieza a su cesta o no.
Por ello, es de máxima prioridad el tener bien planchadas y limpias las prendas, ¡tu imagen depende de ello! Puede dar pereza el hecho de prepararlas e incluso de probártelas, pero te aseguramos que notarás la diferencia.
2. Es de bien nacida ser agradecida
A veces, nos podemos encontrar con transacciones en las que no hayamos mediado palabra con nuestra clienta. No pasa nada, no te tienes que hacer amiga de todo el mundo, ahora sí, al menos agradécele la compra y valórala con 5 estrellas si todo ha ido bien. Quizás así, te ganes una seguidora más.
3. Ojo con el copyright
Vinted reconoce las fotografías que no son propias y es capaz de eliminar de tu armario aquella prenda de la que habías encontrado en Google cómo le quedaba a la modelo de la marca. Para evitar tener que hacer trabajo en vano, utiliza solamente fotos que hayas hecho tú.
Y con estos DO’s y DON’Ts, estamos seguras que serás una vendedora implacable y ayudarás a darle una segunda (o tercera) vida a aquella prenda que algún día amaste.
